El séptimo día de la Feria Del Vergel 2025 fue un verdadero estallido de talento en el escenario cultural, donde niñas, niños y jóvenes demostraron que el arte en Atotonilco el Alto y la región está más vivo que nunca.
La tarde comenzó con la presentación del Ballet Couler, quienes cautivaron al público con su elegancia, precisión y técnica impecable. Cada paso y cada coreografía reflejaron disciplina, pasión y un profundo amor por la danza.
Posteriormente, la Danza Urbana de La Barca encendió el ambiente con energía, ritmo y un estilo auténtico que conectó con el público desde el primer momento. Sus movimientos urbanos y dinámicos pusieron el escenario en ebullición, mostrando la fuerza creativa de las nuevas generaciones.
El cierre del espacio cultural estuvo a cargo del taller de canto, donde sus alumnos ofrecieron un concierto lleno de sensibilidad y talento. Con voces frescas y llenas de emoción, interpretaron piezas que tocaron el corazón de quienes se encontraban presentes, dejando claro que la música es una de las grandes joyas que florecen en esta fiesta del pueblo.
Desde el escenario principal, Raúl Hernández “El Tigre Solitario” se apoderó de la explanada con su estilo inconfundible. Con cada acorde y cada canción, conquistó al público atotonilquense, provocando miles de voces que se unieron a sus interpretaciones en una noche cargada de sentimiento y energía.
Su concierto fue una experiencia inolvidable: intensa, emotiva y llena de esos momentos que solo un verdadero ícono de la música puede regalar.
La Feria del Vergel sigue escribiendo historias memorables…
